El origen de Atenas
Llegó el momento en que la polis alcanzó un grado nivel de prosperidad envidiable, y con ello necesitaban de un dios el cual les brindaría protección. No tardo mucho para que Poseidón y Atene
a se ofrecieran a ser los próximos guardianes, ambos dioses estaban dispuestos a luchar por ello hasta llegar a las ultimas consecuencias por lo que Zeus tuvo que intervenir y dejó que los atenienses escogerían a quien diera el mejor regalo, así que ambos dioses acordaron que cada uno haría un regalo al pueblo y que éstos elegirían el que mayor fuese de su agrado.
El primer regalo fue ofrecido por Poseidón, sostuvo fuerte su tridente y golpeo el suelo y del suelo empezó a brotar una fuente, pero su agua era salada por lo que no sería útil, ademas que rápidamente empezó a inundar la tierras de los pobladores estropeando sus cultivos.
El siguiente turno correspondió a Atenea, quien tras el desastroso regalo de Poseidón ofrecio el primer árbol de Olivo, después de ver lo sucedido solicitaron la ayuda de Atenea. Ella limpio las aguas saldas y al finalizar hizo brotar un gran árbol de olivo. El pueblo empezó a examinar aquel árbol y descubrieron lo que este podía ofrecer como un bondadoso aceite que podía ser empleado en la gastronomía, los perfumes y algunos otros cuidados, por lo que sin ninguna los dioses olímpicos decidieron asignar la región a Atenea y los pobladores nombraron la ciudad en honor a la diosa: Atenas.
Al verse derrotado, Poseidón hizo caer su cólera en la nueva ciudad de Atenas y ahogó la mayor parte de ella, pero Zeus intervino para que no fuese un desastre total. Para calmar su ira Zeus le propueso que desahogase su íra contra las mujeres atenienses ya que a la hora de la votación en el mundo de los humanos todas las mujeres votaron a favor de Atenea y la mayoría de los hombres votó por Poseidón pese a la inundación de sus tierras, Poseidón ordeno que cualquier mujer Ateniense se le negara el derecho al voto, ademas que el apellido de su descendencia solo este conformado por el apellido del padre.
Pese a todo esto gracias al cuidado de Atenea la ciudad se desarrolló hasta ser una de las más gloriosas ciudades de la historia.
La mitología es mi pasión
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